La selección natural, después de cientos de millones de años, dejó de existir en el hombre. Los cortos de vista, los sordos, los mancos, los cojos, que estaban condenados a una muerte más que prematura en los albores de la especie, ahora no solo sobreviven, sino que incluso triunfan. Por eso dice Filosón:
En este estado rotundo
de evolución plena y apta
que goza el hombre fecundo,
es el mundo el que se adapta
al hombre, y no el hombre al mundo.
Y si no que se lo digan a los políticos que nos representan. Esos sí que son ciegos, sordos e inútiles y el mundo se ha adaptado a ellos.....
ResponderEliminarEso ya es el colmo de la evolución, o de la involución.
EliminarPros y contras de la evolución
ResponderEliminarPero siempre vemos más las contras.
Eliminar