Candidalgia, a quien últimamente concedo cierta predilección (¿será por la publicación de mi nuevo poemario Como si nada?), trata de dar una enésima definición de la poesía:
Como el zumo de limón
da lo mejor que tenía
dicha fruta en su filón,
de igual modo la poesía
da zumo de corazón.
El otro día compré una variedad de tomate que se llamaba corazón de buey. El corazón lo mismo vale para un roto que para un descosido. Con él me hice un gazpacho de poesía...Saludos.
ResponderEliminarCon ese nombre y ese tamaño, me imagino un gazpacho histórico y delicioso, y se me hace la boca agua incluso a estas horas de la mañana. Saludos abanicados y que comas más corazones.
EliminarLa poesía es todo corazón y emoción. Hay que vivirla.
ResponderEliminarLa poesía es, al menos, lo más bonito que se puede hacer con las palabras.
EliminarLa poesía siempre da algo, es muy generosa.
ResponderEliminarGenerosa con quien la lee y con quien la escribe.
Eliminar