Acércanse las fechas navideñas y el optimismo económico auspiciado por el Gobierno vuelve a incrementar el presumible gasto medio de las familias en estas fiestas, para las que Ponzoñón dedica el siguiente aguijón:
El consumismo no trata
de comprar ninguna cosa
por precisa o imperiosa,
sino porque está barata.
Miedo me dan estas fechas. Ya no sólo por el malgastar despiadado que tenemos en estos días, sino por la cantidad de gente que nos peleamos por conseguir un artículo y las largas colas que se forman tanto en las ciudades como en las cajas de los establecimientos....Repito...miedo me da.....
ResponderEliminar¡Huy, las colas, las estanterías arrasadas, vacías! La única compensación (y grande), la alegría de los agasajados.
EliminarHombre,es que una ganga no se puede dejar pasar!!! Ajajaja
ResponderEliminarY una ganga bien merece una trampa bancaria.
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