Siguiendo con las propuestas de regalos de mi ocurrente terrario, Filosón sugiere uno que a nadie se le habrá ocurrido: ¡un móvil! Pero como Filosón es Filosón, no puede evitar atufar a trascendencia: Si Dios hubiese tenido nuestra evolución más clara, hubiera hecho el oído con un cuadro bien medido donde el móvil encajara.
jajajaja. Se tarde más en escribir, es verdad, pero cuando tienes que decir, informar o, comunicar algo y no tienes ganas de hablar, ya sabes por eso del humor y los estados de ánimo, lo mejor es un whatssapp.
Dios no se equivoca,Daniel,¿no ves que el móvil se usa para todo menos para hablar por él? ;o)
ResponderEliminarEs verdad, Susana: ya no se habla, se escribe, lo cual es absurdo, porque se tarda mucho más.
EliminarPero los dioses también nos dirigen con sus mandos a distancia.
ResponderEliminarLo malo es que los aparatos no responden bien a los mandos.
EliminarYa mismo los dispositivos nos lo implantarán como si fuera un chip y será parte de nosotros...
ResponderEliminarO nosotros parte de ellos.
Eliminarjajajaja.
ResponderEliminarSe tarde más en escribir, es verdad, pero cuando tienes que decir, informar o, comunicar algo y no tienes ganas de hablar, ya sabes por eso del humor y los estados de ánimo, lo mejor es un whatssapp.
O incluso lo mejor es ni siquiera escribir el Whatsapp.
Eliminar