Sócrates sigue vigente hoy en día. Nos lo demuestra Filosón en esta anécdota:
En una playa mugrienta,
el socorrista reñía
con un hombre que quería
bañarse en plena tormenta.
Por más que este le argumenta,
razona, ruega y se enfada,
el socorrista, en su grada,
con gesto todo hierático,
dijo sereno y socrático:
«Sólo sé que no se nada».
¡Ay, esa "cachúa" ran estupenda! ¡Ojalá ña pillara yo de vez en cuando!
ResponderEliminarEsa es la ataraxia de los estoicos, que es un raro don aun entre los estoicos.
EliminarReconocer la ignorancia
ResponderEliminares la virtud del más sabio.
Es mejor ser monosabio
Que torero en arrogancia.
Sabios consejos das, más con retraso,
Eliminarpuesto que nadie les hacemos caso.
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ResponderEliminarNadar sin nada envuelto en la nada.
ResponderEliminar¡Qué naderías hace usted!
EliminarSaber que no se sabe nada es saber mucho más de lo que se imagina.
ResponderEliminarMse hecho, es el principio imprescindible de la sabiduría.
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