No creí que pudiera, pero Viperio, en su afán por aguijonear las cinco vocales españolas, la ha emprendido ahora con la I, en una batalla de la que casi sale derrotado. Mirad el resultado del combate:
Dirimí sin ti mis crisis
y mi bilis incivil,
y si vi mi fin difícil,
di mil brindis y viví.